27 de julio de 2012

Theatrum: MILAGRO DE SAN COSME Y SAN DAMIÁN, el prodigioso sueño de un sacristán en Roma






MILAGRO DE LOS SANTOS COSME Y DAMIÁN
Isidro de Villoldo (Villoldo, Palencia ? - Sevilla 1560)
Hacia 1547
Madera policromada
Museo Nacional de Escultura, Valladolid
Escultura renacentista española






     Este relieve, lejos de ser considerado una genial obra maestra de la escultura renacentista hispana, presenta el interés especial de su peculiar iconografía, que aporta todo un testimonio de las creencias sociales y religiosas vigentes durante el reinado del emperador Carlos V, una imagen totalmente incomprensible a los ojos de nuestros días por recurrir aparentemente a un planteamiento racista para dejar constancia de un supuesto hecho sobrenatural recogido en la hagiografía de los santos Cosme y Damián, según aparece descrito en La Leyenda Dorada de Santiago de la Vorágine.

     Es en esta recopilación de las vidas de santos, escrita en torno a 1275, donde se narran diversos episodios biográficos de los hermanos gemelos Cosme y Damián, naturales de Arabia (Cilicia romana), de los que la tradición cristiana oral afirmaba que ejercieron la medicina y la cirugía sin cobrar sus servicios a los enfermos, hasta que fueron martirizados hacia el año 300 por orden de Diocleciano. Primero torturados, quemados y asaetados, castigos a los que sobrevivieron por intervención divina,  finalmente decapitados a golpe de espada. Sus cuerpos fueron enterrados en la ciudad siria de Ciro (Cirrhus), lugar convertido posteriormente en una basílica desde la que fueron distribuidas sus reliquias primero a Roma, después de ser proclamados como santos patronos de la medicina y donde el papa Félix (526-530) levantó en su honor una basílica en el Foro Romano, y después a distintos monasterios europeos, como el santuario erigido bajo su advocación en Liesa, en el Alto Aragón, que en 1396 se acompañó de una cofradía en Huesca auspiciada por el rey Martín.

     Precisamente la magnífica basílica romana construida por el papa Félix sería el escenario del milagro que narra el relieve, traducido en imágenes con cierta libertad interpretativa, aunque con gran elocuencia, por el escultor Isidro de Villoldo, que como discípulo y colaborador de Alonso Berruguete fue uno de los artistas más representativos de la escuela de Ávila.

     Según Santiago (Jacobo) de la Vorágine, un sacristán de aquel templo, donde se encargaba de la limpieza y vigilancia, sufrió un tumor que le produjo la necrosis completa en una de sus piernas. Cierta noche pudo contemplar en sueños como acudían junto a su lecho los santos Cosme y Damián provistos de medicamentos y objetos quirúrgicos para operarle, al tiempo que uno de los hermanos preguntaba al otro: ¿Dónde podríamos encontrar carne sana y apta para colocarla en el lugar que va a quedar vacío al quitarle la podrida que rodea los huesos de este hombre?. El otro recordó el reciente entierro de un hombre etiope en el cementerio de San Pedro ad Vincula, indicándole que podía acudir para seccionar una pierna al cadáver y después extraer la carne necesaria para reponer la que debían amputar al enfermo. Uno de los santos regresó del cementerio con la pierna sin vida, tras lo cual procedieron a amputar la que tenía dañada el sacristán y a realizar un trasplante que fue aplicado por medio de un ungüento. Acto seguido, los dos hermanos condujeron al cementerio la pierna amputada y la depositaron en la sepultura del etiope. Cuando despertó el sacristán pudo comprobar que sus dolores habían desaparecido, contemplando, a la luz de una candela, que su pierna estaba completamente sana, saltando de la cama con alegría para despertar a sus familiares y contarles el milagro que todos pudieron comprobar.

     El momento en que los santos realizan el milagroso trasplante es el que refleja la escena del relieve, que aparece ambientada en una alcoba donde el sacristán reposa en una cama con dosel, mientras uno de los hermanos médicos le toma el pulso y sujeta el ungüento y el otro procede a insertar la pierna como quien pega con cola dos trozos de madera.

Milagro de San Cosme y San Damián. Maestro de los Balbases, h. 1495.
Iglesia de San Cosme y San Damián, Burgos.
     Los santos lucen el tipo de indumentaria utilizada por los galenos en el momento en que se hace el relieve, lo mismo que el material quirúrgico utilizado para la operación, que aparece depositado sobre un banco colocado a los pies de la cama. Sin embargo, lo más llamativo es que, para impregnar dramatismo al pasaje, el escultor se aparta de la fidelidad del relato y recurre a colocar en primer plano la figura del donante vivo, un personaje de raza negra, tratado como un esclavo, con que con gesto de dolor y su mano colocada en la rodilla se queja de la amputación sufrida.

     Más afinada es la versión que sobre el mismo tema pintara sobre tabla el denominado Maestro de los Balbases hacia 1495, posiblemente para la iglesia de San Cosme y San Damián de Burgos, donde el planteamiento compositivo es muy similar, aunque allí no aparece el donante, sino solamente el trozo de pierna amputada al difunto, adquiriendo el valor de lo que sería el primer trasplante conocido, en este caso con un carácter milagroso avalado por la presencia de tres ángeles que ejercen de enfermeros.

     El relieve de Isidro de Villoldo ofrece un relato fácilmente comprensible por el espectador, aunque hoy a primera vista pueda incluso llegar a escandalizar, si bien responde a una mentalidad felizmente superada y que tuvo su punto de inflexión en la célebre "Controversia de Valladolid", celebrada entre 1550 y 1551, justamente durante los mismo años que se realiza el relieve, en la que participaron destacados ideólogos de la orden de predicadores, como fray Bartolomé de las Casas, defensor de los derechos de los indígenas frente a las tesis de Juan Ginés de Sepúlveda, que les consideraba seres inferiores, idólatras y esclavos por naturaleza, llegando a comparar su modo de vida social a la organización animal de las abejas.

     Al margen de estas disquisiciones surgidas en el seno de la Iglesia, puede afirmarse que tanto este relieve de Valladolid como aquella pintura burgalesa ponen de manifiesto la exaltación que hicieran los gremios, a mediados del siglo XVI, de sus santos patrones, en este caso de los médicos, que fomentaron la presencia de los santos hermanos Cosme y Damián en las capillas de sus cofradías y en sus capillas funerarias. De igual manera, este relieve refleja la mentalidad de la sociedad hispana y la situación producida a partir del siglo XV, cuando a través de las rutas de navegación portuguesas muchos habitantes de Guinea eran capturados y trasladados al puerto de Sevilla, desde donde eran repartidos para ser vendidos como esclavos por todas las ciudades españolas, incluidas las americanas, siendo un rasgo de distinción tener esclavos a su servicio por todos los estamentos sociales, desde la realeza y la nobleza a personajes del clero, comerciantes, artistas y artesanos. El triste episodio de la esclavitud, agravado con la actividad de los "encomenderos" en tierras americanas, no se abolió oficialmente en España hasta el año 1837.

      El relieve del milagro de San Cosme y San Damián fue encargado por el doctor Francisco Arias para un retablo que presidía su capilla funeraria en el desaparecido convento de San Francisco de Valladolid, donde fue enterrado en 1547, el mismo año en que pudo rematarse la obra. Allí permaneció hasta que durante el proceso desamortizador del siglo XIX pasó a engrosar, junto a otras muchas obras de dicho convento, los fondos del Museo Provincial de Bellas Artes, germen del actual Museo Nacional de Escultura, en cuyas salas se expone en la actualidad.

     Como obra artística adolece de algunos defectos de perspectiva en el trazado del ámbito espacial y en el uso de escorzos, aunque la talla presenta la finura que caracteriza a este escultor en el tratamiento de los rostros y los plegados de los paños, siendo la obra realzada con la aplicación en su acabado de una policromía preciosista en la que predominan los esgrafiados y los fondos de oro tan del gusto de la época. Pero todos estos valores pasan a un segundo plano al prevalecer la habilidad para narrar una escena impactante que, a modo de crónica de otro tiempo, sigue sorprendiendo a todos los que reparan en ella.

Informe: J. M. Travieso.

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3 comentarios:

  1. Изумительная работа.

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  2. SAN COSME Y SAN DAMIAN: SOLICITO TU AYUDA PARA UN BEBE PEQUEÑO DE TAN SOLO 11 MESES SE LLAMA JULIAN MARCELO LIENCRES LUZARDO. ESTA PADECIENDO PROBLEMAS DE SALUD, TE PIDO CON HUMILDAD POR ESE BEBE, PARA SU RECUPERACION, AYUDALO PORFABOR .INTERCEDE ANTE DIOS.CONCEDE TU INTERCECCION Y MILAGRO DE RECUPERACION.GRACIAS DESDE YA.EL BEBE ES DE CANELONES.URUGUAY.

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  3. SAN COSME Y SAN DAMIAN:SOLICITO SU AYUDA LA DE AMBOS PARA QUE EL BEBE PEQUEÑO FELIPE (HIJO DE CARINA BELEDO) DE URUGUAY SE RECUPERE DE SALUD.INTERCEDAN ANTE JESUS PARA QUE OTORGE QUE SIGA VIVIENDO , QUE SE RECUPERE.QUE LE PIDA A DIOS PADRE QUE LO DEJN VIVIR.POR FABOR.EL BEBE ESTA INTERNADO EN MONTEVIDEO URUGUAY.GRACIAS DESDE YA.

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