31 de agosto de 2012

Visita virtual: LA PUERTA DEL PARAÍSO, nuevo lenguaje para un compendio bíblico


PUERTA DEL PARAISO
Lorenzo Ghiberti (Florencia, h. 1380 - 1465)
1425-1452
Bronce y bronce sobredorado
Baptisterio de la catedral de Florencia
Escultura del Renacimiento. Quattrocento italiano

     Por su magnificencia, por su grandiosidad y por la calidad de los relieves que ofrece esta puerta, cuenta la leyenda que Miguel Ángel declaró que merecería estar colocada a la entrada del Paraíso, siendo conocida con este sobrenombre desde entonces. Aún cuando no hubiera realizado más obra en su vida, que no es el caso, esta original e impactante puerta coloca a su autor, el innovador Lorenzo Ghiberti, en la cumbre de la escultura renacentista del siglo XV en Italia.

     Porque la Puerta del Paraíso es el paradigma de los derroteros emprendidos por el arte en la Florencia del Quattrocento, cuando toda una pléyade de artistas, amparados por el mecenazgo y su nueva consideración social como creadores intelectuales, no meramente artesanales, fueron capaces de impulsar un nuevo movimiento artístico y filosófico en base a la recuperación de la estatuaria clásica y la aplicación de estudios científicos de óptica y perspectiva.

UN CONCURSO CON EL BAPTISTERIO DE FLORENCIA COMO ESCENARIO

     La Puerta del Paraíso es el final de un proceso, centralizado en el Baptisterio de la catedral de Florencia, que marca la decisiva transición del arte gótico a unas formas revolucionarias después de la conmoción que causara su presentación en público. Todo tuvo su origen en un concurso convocado en 1401 para realizar dos de las tres puertas del Baptisterio de San Juan, siguiendo el modelo de la puerta ya realizada por Andrea Pisano en 1330.

     La convocatoria, restringida a orfebres y escultores, causó una gran expectación en la pujante ciudad, donde las innovaciones artísticas eran vividas como un fenómeno de masas, exigiendo que cada artista entregara como muestra una placa o formella, de forma cuadrilobulada, con el tema en relieve del Sacrificio de Isaac. A cada artista le fue entregado el bronce para que todos lo realizaran con el mismo tema, dimensiones y forma del contorno, presentándose al concurso escultores de la talla de Jacopo della Quercia, Francesco de Valdambrino, Lorenzo Ghiberti y Filippo Brunelleschi, siendo este último el que daba el concurso por ganado. Sin embargo, Lorenzo Ghiberti logró sorprender al tribunal, formado por 34 jueces, después de asesorarse sobre el dramático tema bíblico y con la tenacidad de un escultor y la paciencia de un orfebre ir dando forma al relieve que causó, y sigue causando, una enorme admiración. Como ganador del concurso, le fue encomendado el comienzo de la puerta en 1402.

     Ghiberti estuvo ocupado en realizar la puerta entre 1403 y 1424, que fue colocada en la fachada norte del Baptisterio, junto a la colocada en el muro meridional, frente a la fachada de la catedral, aquella que realizara Andrea Pisano hacía casi cien años. Durante esos veinte años compaginó el cincelado de los relieves de la puerta con el diseño de vidrieras para la catedral florentina, la elaboración de candelabros y las esculturas de San Juan Bautista y San Mateo destinadas a las hornacinas de la fachada de la iglesia de Orsanmichele. La espectacular puerta se compone de veintiocho formellas con escenas del Nuevo Testamento en las que Ghiberti abandona todas las formalidades góticas, a excepción del marco cuadrilobulado impuesto, mostrando una depurada transición al clasicismo.

     El éxito de aquel trabajo proporcionó al escultor un gran prestigio social y su reconocimiento como escultor creativo, motivo por el que también le fue encargada la tercera puerta del recinto, adjudicada directamente por el gremio de comerciantes florentinos, sin la convocatoria de ningún concurso. En esta ocasión la puerta, destinada al muro sur, debía recoger una serie de escenas bíblicas del Antiguo Testamento. En ella Ghiberti, que gozó de una gran libertad para componer los temas, superó todas las expectativas al presentar diez sorprendentes relieves de formato cuadrado, enmarcados por una sucesión de pequeñas hornacinas con figuras y medallones con bustos, todo ello en bronce sobredorado que destaca sobre la pátina del marco y de las hojas batientes.

     La espectacularidad de la nueva puerta, en la que estuvo ocupado desde 1425 a 1452, motivó que la puerta de Andrea Pisano fuese desplazada a la fachada sur y colocada en su lugar, frente a la entrada de la catedral, la legendaria Puerta del Paraíso, que todavía sigue causando asombro a cuantos la contemplan, una obra en la que Ghiberti se supera a sí mismo al aplicar en la composición de las escenas sus consideraciones sobre la perspectiva y sus estudios de óptica que dejaría redactados en 1440, mientras realizaba la puerta, en sus I Commentarii, tres libros en los que también incorpora biografías de artistas del Trecento. La Puerta del Paraíso, además del reconocimiento público como intelectual, proporcionó a Ghiberti una economía desahogada que le permitió la compra de casas y propiedades.

LA ORIGINAL E INNOVADORA ICONOGRAFÍA DE LA PUERTA DEL PARAÍSO

     Los veintiocho relieves que realizara para su primera puerta, Ghiberti les reduce en la Puerta del Paraíso a diez de mayor tamaño que se articulan formando dos calles, con cinco en cada hoja batiente. Se complementan, como ya se ha dicho, con un marco formado por listones laterales con dos hornacinas junto a cada relieve en las que se insertan gráciles figurillas de profetas y sibilas, de extraordinaria elegancia, que se alternan con motivoss vegetales y animales y 24 pequeños medallones con bustos de artistas contemporáneos, en los ángulos de los relieves, entre los que se permite la licencia de incluir su propio retrato y el de su hijo Vittorio, que colaboró en la fundición y cincelado de estos motivos decorativos.

     Iconográficamente la puerta es un compendio de los principales pasajes del Antiguo Testamento, podría decirse que una Biblia en imágenes, en unas ocasiones con una escena única y en otras con pasajes simultáneos. Las formellas representan el Paraíso Terrenal, con la creación de Adán y Eva, el pecado original y la expulsión del Paraíso, la fratricida historia de Caín y Abel, la historia de Noé y el Diluvio Universal, la historia del patriarca Abraham y el sacrificio de Isaac, la historia de Esaú y Jacob, la historia de José en Egipto, la historia de Moisés, con la entrega de las Tablas de la Ley y el paso del mar Rojo, la historia de Josué y la toma de la ciudad de Jericó, la lucha de David y Goliat y la historia de Salomón con la reina de Saba.

     En estas escenas Ghiberti aplica la técnica del schiacciato, es decir, la degradación del relieve a medida que se acerca al fondo, de modo que los volúmenes oscilan desde los primeros planos, con figuras próximas al bulto redondo, a las ligeras insinuaciones del fondo, tratado con un relieve similar al de la numismática. Asimismo, recurre a una estudiada organización de planos sucesivos en los que aplica con maestría una degradación de tamaños basada en las leyes de perspectiva descritas por Brunelleschi, de modo que consigue en las escenas una extraordinaria profundidad, ya sea en los temas en los que predomina el paisaje o en aquellos que tienen construcciones como referencia espacial, en los que aplica la ley de la pirámide visual con un punto de fuga central.

     En la mayoría de las escenas, Ghiberti coloca un gran número de personas y animales, combinando gran variedad de poses y gestos de alto refinamiento e idealización. Es frecuente la colocación de figuras de espaldas al espectador para realzar la profundidad de los grupos, algo impensable en el arte precedente, así como numerosas figuras en escorzo y con la incorporación de numerosos personajes secundarios a los lados, como en los coros de las tragedias griegas, dando lugar una iconografía renovada de temas sagrados tradicionales que dio lugar a grandes polémicas entre los humanistas florentinos. Tampoco pasa desapercibida la inspiración de las figuras en obras de la estatuaria clásica, pues sólo basta observar como la figura de Dios del Paraíso Terrenal recuerda un Júpiter y la de Eva una Venus.

     La Puerta del Paraíso representa una nueva visión del arte en la que prevalece el sentido de la proporción, la recuperación de los modos greco-romanos en el naturalismo de las figuras, incluyendo la incorporación de desnudos integrales, la composición tridimensional de carácter pictórico, con escenas diáfanas y muy racionales, el minucioso estudio del claroscuro en el volumen, el equilibrado contraste de curvas y rectas para definir cada pasaje y la combinación calculada de figuras serenas y elegantes con otras plenas de movimiento, destacando la gran variedad de tipos —de diferente género, edad y función— de los que no existen precedentes anteriores en su tiempo, lo que coloca a Ghiberti en la cumbre de la creatividad artística renacentista y como exterminador de las influencias góticas. A todo ello se suma el trabajo de un exquisito orfebre en el cincelado de los más mínimos detalles anecdóticos y narrativos, así como el carácter sobrenatural que infunde a las escenas la ardua tarea del bronce sobredorado.

     Es por ello que la figura del gran maestro Ghiberti sigue originando tanta admiración como la que gozara en su tiempo, cuando en su amplio taller, el más prestigioso de la Florencia de la primera mitad del siglo XV, se formaban como aprendices artistas como Donatello, Michelozzo, Paolo Uccello, Masolino y Filarete.

     Esta obra maestra sufrió en 1966 las calamitosas consecuencias de las inundaciones producidas por el desbordamiento del Arno, motivo por el que tiempo después las formellas originales fueron restauradas y depositadas en el vecino Museo de l'Opera del Duomo de Florencia, siendo colocadas unas réplicas en la puerta del Baptisterio que a diario son visitadas por miles de turistas, pues esta obra es uno de los iconos de la ciudad toscana.

Informe: J. M. Travieso.


Vista de la Puerta del Paraíso en alta definición.

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6 comentarios:

  1. 1:2corinthians12
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    la puerta del paraiso es una puerta que contiene arte antiguamente era muy importante, en ella hay dibujos que representan guerras y tambien hay cuadros en las que aparece.

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  2. La Puerta del Paraíso es el final de un proceso, centralizado en el Baptisterio de la catedral de Florencia, que marca la decisiva transición del arte gótico a unas formas revolucionarias después de la conmoción que causara su presentación en público.

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  3. la puerta del paraiso es muy bonita y cuesta mucho hacer un trabajo sobre ella

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