EL OTOÑO,
MUCHACHOS
El otoño,
muchachos. Ha llegado
sin sentirlo
siquiera,
lluvioso,
melancólico, callado.
El familiar
bullicio de la acera
tan alegre
en las noches de verano
se va
apagando a la oración. La gente
abandona las
puertas más temprano.
Las abandona
silenciosamente.
Tardecita de
otoño, el ciego entona
menos
frecuente el aire que en la esquina
gemía el
organillo ¡Qué tristona
anda, desde
hace días, la vecina!
¿La tendrá
así algún nuevo desengaño?
Otoño
melancólico y lluvioso,
¿Qué
dejarás, otoño, en casa este año?
¿Qué hoja te
llevarás? Tan silencioso
llegas que
nos das miedo.
Sí, anochece
y te
sentimos, en la paz casera,
entrar sin
un rumor ¡Cómo envejece
nuestra tía
soltera!
EVARISTO CARRIEGO (1883-1912)
* * * * *
No hay comentarios:
Publicar un comentario